Desarrollo humano es una materia que se integra en el plan de estudios con el propósito de crear un espacio de reflexión, que promueva en el estudiante la generación de una serie de conceptos y planteamientos propios, en torno a lo que es el ser humano y su desarrollo; que identifique los factores que inciden en su comportamiento y los que son necesarios desarrollar para su autorrealización personal y profesional, con énfasis en su estructura psicológica y sus potencialidades; lo anterior, para que adquiera el compromiso de su formación integral permanente y su actualización profesional continua de manera autónoma; y para que pueda asumir las implicaciones de su desempeño profesional en el entorno político, social, económico y cultural.
A los estudiantes les corresponde vivir en un mundo complejo, lleno de dinamismos culturales, sociales, comerciales, ecológicos. El ser humano que demanda el mundo contemporáneo, debe ser solidario, creativo, afectivamente integrado, democrático, con pensamiento crítico fundamentado en conocimientos tanto humanos, cómo económicos, tecnológicos, científicos, culturales, ecológicos, debe estar comprometido con la biodiversidad, la singularidad y la pluralidad de todos los habitantes de la tierra, la diversidad cultural, de pensamiento, y con los seres más vulnerables del planeta.
En el contexto actual es necesario que la educación permita que el estudiante busque el conocimiento y la interpretación de un mundo globalizado y cómo insertarse en él cómo ser humano para un desempeño exitoso cómo persona y cómo profesional en el siglo XXI.
“En la era planetaria es necesario aprender a vivir, a compartir, a comunicarse, … nos hace falta aprender a ser y a comulgar como humanos del planeta tierra. No solamente ser una cultura, sino habitantes de la tierra. Generar un espacio, que recree en nuestra humanidad un espíritu que anteponga a cualquier situación económica, social, política, religiosa: el respeto por los derechos y la dignidad del hombre en su singularidad individual y en su comunidad antropológica”.
La educación debe contribuir a formar mentalidades planetarias, con una cosmovisión que acepte la diversidad, y la singularidad (Edgar Morin).
Debemos inscribir en el nuevo “imprinting cultural”:
La conciencia antropológica que reconoce nuestra unidad en nuestra diversidad.
La conciencia ecológica es decir la conciencia de habitar con todos los seres mortales una misma esfera viviente.
La conciencia cívica terrenal, es decir de la responsabilidad y de la solidaridad para los hijos dela tierra.
La conciencia espiritual de la humana condición que viene del ejercicio complejo del pensamientoque nos permite comprendernos y autocriticarnos entre sí.”
- Profesor: Adán Alberto Esperanza Arellanes
- Profesor: moodle moodle